mayo dia 17

UN DIA A LA VEZ

365 Momentos con Él: MAYO

MAYO

17 de Mayo – 365 momentos con El

"Fe en el Altar: El Lugar Donde Todo Cambia"

¿Sientes que estás cargando más de lo que puedes soportar?

¿Te has preguntado por qué, a pesar de orar y esforzarte, aún no llega eso que tanto anhelas?

Tal vez estás esperando un milagro, una respuesta, un cambio. Tal vez has hecho de todo… menos soltarlo.

Hoy quiero hablarte de un lugar donde todo cambia, donde el alma encuentra descanso y la fe se renueva: el altar de Dios.

Quédate. Este mensaje no es casualidad.
Es una invitación divina para rendir lo que más amas… y recibir lo que más necesitas.

MAYO DIA 17

17 de Mayo – 365 momentos con El.

"Lo Entrego Todo en el Altar"

17 de Mayo – Un Día a la Vez: 365 Momentos con Él

"Cuando Solté, Dios Actuó"

1 Pedro 5:7
“Depositen en él toda ansiedad, porque él cuida de ustedes.”
¿A quién debemos entregar nuestras cargas? ¿Dónde debemos soltar aquello que nos duele y nos agobia?
En Dios. En Su altar.

Muchos dicen:

“No seré feliz hasta que encuentre un esposo.”
Otros: “No podré ser feliz hasta que me libre del esposo.”
“Necesito una casa más grande para estar en paz.”
“Solo seré feliz cuando logre ese ascenso…”

Pero la verdad es esta:
Cuando perdemos la paz, dejamos de disfrutar la vida que Dios nos ha dado.

Cuando los sueños y las metas empiezan a frustrarnos, es una señal clara: nos estamos aferrando demasiado. Es momento de rendirlo todo… en el altar.
Entrégaselo a Dios.
Dile al Señor:
“Dios, te entrego esto. Tú conoces mis anhelos, sabes los sueños que pusiste en mí.

Pero no quiero seguir frustrado por lo que aún no ha sucedido.
Confío en tus tiempos, no en los míos.
Tú sabes qué es lo mejor para mí.
Y aunque no ocurra, seguiré confiando en Ti con todo mi corazón.”

Eso es fe. Eso es adoración verdadera.

Es decirle a Dios:

“Quiero entrar a esta universidad, pero si no me aceptan, seguiré confiando en Ti.”
“Deseo mi sanidad, pero aunque no ocurra ahora, confiaré en tu propósito.”

Nuestra fe se revela en nuestras acciones.
Y a veces, Dios nos pedirá que soltemos lo que más amamos, solo para recordarnos que Él debe ser lo primero.

Como AbrahamGénesis 22:9
“Cuando llegaron al lugar señalado por Dios, Abraham construyó un altar y preparó la leña. Después ató a su hijo Isaac y lo puso sobre el altar, encima de la leña.”
Abraham obedeció. Lo preparó todo. Y justo cuando iba a sacrificar a Isaac, Dios le dijo:

“¡Detente! No lo hagas. Solo quería saber que YO soy lo más importante para ti.”

¿Estás esperando una promesa?
Ponla en el altar. Entrégala.
No hay mejor lugar para dejar tus anhelos que en la presencia de Dios.
Ana, una mujer sin hijos, vivía profundamente angustiada. Pero ella no dejó de ir al altar.

1 Samuel 1:7
"Cada año, cuando iban a la casa del Señor, sucedía lo mismo: Penina la atormentaba, hasta que Ana se ponía a llorar y ni comer quería."

¿Sabes cuándo cambió su semblante?

Cuando fue al altar y le creyó a Dios.
1 Samuel 1:17-19
"—Vete en paz —respondió Elí—. Que el Dios de Israel te conceda lo que le has pedido… Desde ese momento, su semblante cambió."

Aunque la promesa aún no se cumplía, ella decidió creer. Y su fe trajo descanso a su alma.

El futuro de Dios ya es tuyo
La Biblia dice: “Por sus heridas fuimos curados”.
Está en pasado, pero eso no significa que sea lejano: la promesa ya fue dada. Solo debes creer.

Si Dios lo dijo, ya ocurrió en el cielo, aunque tú aún no lo veas en la tierra.
¡Embarázate de Su promesa!

Aunque aún no lo tengas en tus manos, si crees en su Palabra, ya lo puedes ver con los ojos de la fe.
Suelta el control
No desperdicies tu energía en lo que aún no se cumple.
Llévalo al altar. Déjalo ahí.

Cuando una puerta se cierra, cuando algo parece terminar, recuerda:

Para la oruga, el final parece muerte… pero para Dios, es el comienzo de una mariposa.

Cada proceso, cada dolor, cada demora… te está llevando al propósito.
Cede el control al Espíritu Santo.

No dejes que nada ni nadie te robe el gozo.

Ora así conmigo:
“Dios, estoy confiando en Ti.
Hoy me aferro a tus promesas, pero suelto mi frustración.
Decido ponerme los zapatos de la paz y regresar al lugar de descanso: tu presencia.
Me libero del problema, y mi fe se activa para creerte.”
Isaías 49:23
“...sabrás entonces que yo soy el Señor, y que no quedarán avergonzados los que en mí confían.”

Dios tiene Su manera de obrar.
En el altar lo adoramos, y Él cuida de nosotros.
En el altar, Él cumple Sus promesas.
En el altar, Él concede lo que tu corazón ansía.
Te espero allí… cada día. En el altar de Dios.

"Si hoy sientes que necesitas un cambio en tu vida, un consuelo en tu corazón o simplemente alguien que ore por ti, baja un poco más. Estamos aquí para apoyarte en oración y creer junto a ti que Dios tiene un propósito perfecto para tu vida. No estás solo, y juntos podemos llevar tus peticiones ante Él."

PASO 1

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PASO 2

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PASO 3

"Envía tu petición de oración y permítenos acompañarte en este camino. Estamos aquí para orar contigo y por ti."

BAJA

🙏Oracion Final

Señor, hoy vengo con el corazón abierto y las manos vacías.
Te entrego mis cargas, mis sueños, mis temores y frustraciones.
Ya no quiero controlar lo que solo tú puedes dirigir.
Me rindo en tu altar, creyendo que tus planes son mejores que los míos.
Aunque no vea aún la respuesta, yo decido confiar.
Aunque no entienda el proceso, yo decido adorarte.
Hoy me despojo de la ansiedad y me visto de paz.
Gracias, Dios, porque sé que tú cuidas de mí, y en tu tiempo perfecto, lo harás todo hermoso.
En el nombre de Jesús, amén.

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