UN DIA A LA VEZ

365 Momentos con Él: JUNIO

JUNIO

25 de Junio – 365 momentos con El


Esperar con Esperanza: Cuando el Cielo No Responde


¿Alguna vez has sentido que Dios se ha alejado?

Oras, clamas, esperas… pero el cielo parece cerrado, el silencio pesa, y tu alma grita por una respuesta que no llega. Te preguntas si hiciste algo mal, si Dios se olvidó de ti, si estás solo en medio de la tormenta.

Déjame decirte algo: no estás solo, y no eres el único que ha pasado por eso. Incluso los más grandes hombres de fe enfrentaron momentos donde Dios parecía esconder su rostro. Pero en ese silencio, hay un llamado:
esperar con esperanza.

JUNIO DIA 25

25 de Junio – 365 momentos con El.

Dios Parece Lejano... Pero Nunca Ausente

25 de Junio – Un Día a la Vez: 365 Momentos con Él



Aférrate a la Promesa: Aunque No Sientas a Dios


“El Señor ha escondido su rostro del pueblo de Jacob, pero yo esperaré en él, pues en él tengo puesta mi esperanza.”
—Isaías 8:17

Caminar con Dios parece sencillo cuando todo va bien: tenemos salud, trabajo, familia, amigos. En esos momentos, la fe fluye con naturalidad.
Pero la vida no siempre es así. Hay días grises, de esos en que sentimos que todo se derrumba, cuando la soledad pesa, las oraciones parecen no pasar del techo, y Dios… simplemente parece distante.

Isaías, un gran profeta de Dios, también vivió algo parecido. Él mismo dijo que el Señor había escondido su rostro.
¿Te ha pasado? Oras, clamas, buscas… pero el silencio de Dios te desconcierta. No hay señales, no hay respuestas. Te preguntas:
¿Dónde está Dios en todo esto?
En esos momentos, recuerda esto:
espera en Él, y espera con esperanza.

CUANDO EL SILENCIO PARECE GANAR

Job también vivió esa sensación.
Escucha sus palabras:
“»Si me dirijo hacia el este, no está allí; si me encamino al oeste, no lo encuentro.
Si está ocupado en el norte, no lo veo; si se vuelve al sur, no alcanzo a percibirlo.
Él, en cambio, conoce mis caminos; si me pusiera a prueba, saldría yo puro como el oro.”
—Job 23:8-10

Job fue honesto con Dios. No tuvo miedo de decirle cómo se sentía. Eso también es fe: poder desahogarnos delante del Señor sin máscaras ni discursos bonitos. A veces, lo que más necesitamos es simplemente llorar delante de Él y decirle: “Dios, no entiendo nada, pero aquí estoy.”

Y en ese momento, cuando abrimos el corazón, Dios comienza a restaurarnos. Él no está distante por crueldad, sino porque a veces se esconde para que lo busquemos con todo el alma.

CUANDO SOLO QUEDA UNA PROMESA

“Yo sé que mi Redentor vive, y que al final triunfará sobre la muerte.
Y cuando mi piel haya sido destruida, todavía veré a Dios con mis propios ojos.”
—Job 19:25-26

Job nunca perdió de vista quién era Dios. A pesar del dolor, mantuvo viva su esperanza. Él sabía que Dios era su Salvador, y se aferró a esa verdad con todo su ser.
A veces, lo único que tienes es una promesa. Pero si es de Dios, es suficiente. Abrázala. No la sueltes. No importa cómo te sientas o si no “sientes” a Dios —Él está ahí. Él te ama, tiene el control y nunca te abandonará.
“He aquí, aunque él me matare, en él esperaré…”
—Job 13:15

🙏NO TE RINDAS

No dejes que las emociones o las circunstancias dicten tu fe.
Dios no está lejos. Él está contigo, aún cuando no lo ves, aún cuando no lo oyes. Él pelea por ti, incluso cuando tú ya no tienes fuerzas para seguir.
Cuando estés en el suelo, cuando la batalla te deje sin aliento y parezca que vas a caer… sigue esperando en Dios.
Porque Él no ha terminado contigo. Su silencio no es su ausencia, y su demora no es su olvido.
Pase lo que pase, cueste lo que cueste:

No sueltes tu fe. No dejes de esperar. Porque el que prometió, es fiel.
"Si hoy sientes que necesitas un cambio en tu vida, un consuelo en tu corazón o simplemente alguien que ore por ti, baja un poco más. Estamos aquí para apoyarte en oración y creer junto a ti que Dios tiene un propósito perfecto para tu vida. No estás solo, y juntos podemos llevar tus peticiones ante Él."
PASO 1
Desliza hasta el final
PASO 2
haz clic en el enlace de 'Petición de Oración
PASO 3
"Envía tu petición de oración y permítenos acompañarte en este camino. Estamos aquí para orar contigo y por ti."

🙏Oracion Final

Señor, cuando no te vea, ayúdame a confiar.
Cuando no te escuche, enséñame a esperar.
Aunque el silencio me duela, recuérdame que sigues presente, trabajando en lo invisible.
Fortalece mi fe en los días oscuros y haz que mi esperanza no dependa de lo que siento, sino de lo que sé:
Que me amas, que estás conmigo, y que nunca me abandonarás.
Me aferro a tus promesas, y aunque no entienda tu plan, seguiré creyendo en tu corazón.
Amén.
¿Te gustó este artículo? ¡Déjanos tu opinión y compártelo con tus amigos!
¡Únete a nuestra comunidad y mantente al día con las últimas novedades!
¡Únete a nuestra comunidad y mantente al día con las últimas novedades!

UN DIA A LA VEZ


momentos.365@gmail.com

Tilda Publishing
Hello world!
WhatsApp
Made on
Tilda