UN DIA A LA VEZ

365 Momentos con Él: JUNIO

JUNIO

12 de Junio – 365 momentos con El

Cristianos en Modo OFF: ¿Dónde Quedó Tu Pasión?


¿Alguna vez sentiste que el fuego dentro de ti se estaba apagando?

Ese fuego que antes te impulsaba a orar, a servir, a buscar a Dios con pasión... Hoy parece reducido a un simple hilo de humo. Caminas, respiras, haces lo necesario… pero por dentro, estás en modo OFF.
No eres el único.
No estás solo.
Y, lo más importante:
Dios no ha terminado contigo.

JUNIO DIA 12

12 de Junio – 365 momentos con El.

Del Humo al Fuego: Una Llamada a Volver a Su Presencia

12 de Junio – Un Día a la Vez: 365 Momentos con Él



Vuelve a Encenderte: Dios No Apaga lo Poco que Queda


De niña, me fascinaba ver los fuegos artificiales. Esos destellos chispeantes iluminaban mis noches, y con ellas dibujaba en mi mente mi nombre en el aire como si el cielo me prestara su lienzo por unos segundos.
Pero cuando se apagaba… ¡qué frustración! queria verla siempre encendida.
Años después, me topé con Isaías 42:3:
“…ni apagará el pabilo que humeare…”

Y de pronto, lo entendí.
Hay muchas personas hoy —tal vez incluso tú— que han perdido ese fuego por Dios. Que alguna vez ardieron con pasión por Su presencia… pero hoy solo queda humo. Ya no hay llama, apenas una brasa débil. Están secos por dentro, caminando por la vida en piloto automático.

Y lo más duro es que no siempre fueron así. Estuvieron en Encuentros, en Reencuentros, en conferencias, cursos, consejerías... Y sin embargo, algo se apagó. Se desvaneció ese primer amor.
Hoy muchos prefieren Netflix a un mensaje de fe. Una noche de fiesta antes que una noche de adoración. Algunos incluso mienten diciendo: "Voy a la iglesia", cuando su verdadero destino es una discoteca.

¿Qué nos está pasando?
Veo cristianos caminando en “modo OFF”. Apagados. Desconectados. Ya no oran. Ya no abren su Biblia. Ya no sienten necesidad de buscar a Dios… y lo más peligroso: piensan que pueden vivir así por meses. Pero se están marchitando, lentamente.
Tal vez tú, que estás leyendo esto, sientes lo mismo. Tratas de levantarte, de motivarte, de retomar ese sueño de Dios... pero algo (o alguien) parece soplar ese fuego hasta extinguirlo del todo.

Pero escúchame bien: aún hay esperanza.

Dios no apaga el pabilo humeante.
Él no abandona a los que apenas brillan.
Él no olvida a los que se sienten sin fuerzas.
Quizá alguien te apagó. Quizá la vida te robó el fuego, la pasión, la fe. Quizá alguna noche oscura le dijiste a Dios:
"¿Por qué no me dejas morir ya? ¡Acaba conmigo de una vez!"
Pero Él no ha terminado contigo.

Él permanece fiel.
Aun cuando tú no lo fuiste.
Aun cuando le fallaste una y otra vez.

Él sigue creyendo en ti.
“Si fuéremos infieles, él permanece fiel; él no puede negarse a sí mismo.” — 2 Timoteo 2:13
Dios te dice hoy:
“Corre de nuevo a la fuente. A Mis brasas eternas. Yo volveré a encenderte.”
La distancia entre tú y el fuego de Dios es apenas la de tus rodillas al suelo. No te conformes con vivir en humo, con ser un cristiano apagado. Dios quiere encenderte de nuevo. Quiere tocar tu corazón como lo hacía antes. Solo tienes que buscarlo con desesperación, como si tu vida dependiera de ello… porque en el fondo, lo hace.

Isaías 42:1 nos recuerda:
"He aquí mi siervo, yo le sostendré; mi escogido, en quien mi alma tiene contentamiento..."



🙏 ¿Quieres hacer sonreír a Dios?


Vuélvete a Él.
Rómpela con la rutina. Sé creativo al buscarlo. Habla con Él como solo tú sabes hacerlo. Porque fuiste escogido para ser un pabilo encendido, no un recuerdo del fuego que alguna vez fuiste.
Como dijo Jeremías:
"Había en mi corazón como un fuego ardiente metido en mis huesos; traté de sufrirlo, y no pude." — Jeremías 20:9
Ese fuego todavía puede arder en ti.
Gracias, Dios, por encenderme una vez más.
  • Gracias por poner dentro de mí una llama que nunca podrá ser apagada.
"Si hoy sientes que necesitas un cambio en tu vida, un consuelo en tu corazón o simplemente alguien que ore por ti, baja un poco más. Estamos aquí para apoyarte en oración y creer junto a ti que Dios tiene un propósito perfecto para tu vida. No estás solo, y juntos podemos llevar tus peticiones ante Él."
PASO 1
Desliza hasta el final
PASO 2
haz clic en el enlace de 'Petición de Oración
PASO 3
"Envía tu petición de oración y permítenos acompañarte en este camino. Estamos aquí para orar contigo y por ti."

🙏Oracion Final

Señor, hoy reconozco que mi fuego se ha debilitado.
Me siento como un pabilo humeante, apagado por dentro, sin fuerzas, sin pasión… pero aquí estoy, volviendo a Ti.
Enciende de nuevo mi corazón, aviva mi espíritu, lléname con tu presencia como lo hiciste al principio.
No quiero vivir desconectado de tu propósito ni conformarme con solo sobrevivir espiritualmente.
Tócame, Señor. Háblame. Sedúceme otra vez… porque solo tú puedes prender la llama que nunca se apaga.
Amén.
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