UN DIA A LA VEZ

365 Momentos con Él: JULIO

JULIO

06 de Julio – 365 momentos con El

“Dios, Mi Sanador: La Promesa Que Transforma Tu Diagnóstico”


Hoy quiero hablarte de una verdad eterna que puede cambiar tu vida: Dios es tu Sanador.

Tal vez te encuentras enfrentando un diagnóstico difícil, un dolor que parece no tener fin, o una situación médica que los hombres llaman imposible. Pero déjame decirte algo con total convicción: para Dios no hay nada imposible.

La enfermedad no viene de Dios, la sanidad sí. La cruz de Cristo no solo trajo perdón de pecados, sino también sanidad para cada herida, cada dolencia y cada quebranto.
Hoy es el día para conocer a Dios no solo como tu Salvador, sino también como Jehová Raphá: El Dios que te sana.

Prepárate, porque Su Palabra tiene poder para restaurar tu cuerpo, tu mente y tu espíritu.

JULIO DIA 06

06 de Julio – 365 momentos con El.

“Jehová Raphá: El Dios Que Sana y No Cambia”

06 de Julio – Un Día a la Vez: 365 Momentos con Él


“Aférrate a la Promesa: Dios Tiene la Última Palabra Sobre Tu Salud”



Dios, Mi Sanador
Si hoy estás atravesando una enfermedad, es porque necesitas conocer a Dios como tu Sanador.
El mismo Jesús dijo que no vino por los sanos, sino por los enfermos.
Él es el único que tiene el poder de cambiar cualquier diagnóstico.

Éxodo 15:25-27
Moisés clamó al Señor, y Él le mostró un trozo de madera. Moisés lo echó al agua, y el agua se volvió potable. Allí, en Mara, el Señor estableció un decreto y una norma para probar la fidelidad del pueblo. Les dijo: «Si escuchan atentamente la voz del Señor su Dios, y hacen lo que es recto ante sus ojos, obedeciendo sus mandatos y cumpliendo sus decretos, entonces no les enviaré ninguna de las enfermedades que envié a los egipcios, porque Yo soy el Señor, quien los sana».
Dios no envía enfermedad, Dios envía sanidad.
Él es Jehová Raphá, el Dios que sana, el Médico eterno que nunca cambia.

Salmo 103:3
Él perdona todos mis pecados y sana todas mis enfermedades.
No existe enfermedad que Dios no pueda sanar. Tal vez te dijeron que lo tuyo no tiene cura, que es imposible, irreversible…
Pero Dios te dice hoy: “Yo revierto el diagnóstico. Tú estás sano”.
Te invito a declarar en fe:

“Estoy sano porque Jesús en la cruz pagó por mi sanidad”.

1 Pedro 2:24
Por sus heridas ustedes fueron sanados.
Dios se reveló a sí mismo como Sanador. No es solo algo que hace, ¡es quién Él es!
Él dijo: “Yo soy Jehová tu Sanador”.

Malaquías 3:6
Porque Yo, el Señor, no cambio.
Si Él fue Sanador en el pasado, lo es hoy y lo será siempre. ¡Esa es nuestra esperanza!
Éxodo 23:25
Si sirves solo al Señor tu Dios, Él bendecirá tu alimento y tu agua, y te protegerá de enfermedades.
Cada vez que Jesús encontraba enfermos, los sanaba.

Mateo 12:15
Le siguió mucha gente, y sanó a todos.
Si tú le sigues de cerca, Él también te sanará. La voluntad de Dios es tu sanidad divina.

3 Juan 1:2
Amado, deseo que seas prosperado en todas las cosas, y que tengas salud, así como prospera tu alma.
Cuando Dios te da una promesa es para creerla, no para guardarla.

Proverbios 4:20-22
Hijo mío, está atento a mis palabras… porque son vida a los que las hallan y medicina a todo su cuerpo.
La Palabra de Dios es tu medicina. Aunque las circunstancias griten lo contrario, mantente firme en lo que Él dice.
Recuerda a Ana, que oró con todo su corazón hasta ver respuesta.
¿Has orado tú así? ¿Has clamado desde lo más profundo?

Marcos 11:23-24
Todo lo que pidan orando, crean que lo recibirán y les vendrá.
Mira el ejemplo de Job, un hombre que lo perdió todo pero nunca perdió la fe.
Job 13:15
Aunque Él me matare, en Él esperaré.
Job se aferró a la única cosa que tenía: una promesa de Dios.
A veces, eso es todo lo que necesitas. Aférrate a la promesa.
Te animo a sumergirte en la Palabra:

Salmo 103
Isaías 54
Salmo 91

Deja que Dios te muestre quién es Él:
Tu Sanador. Tu Refugio. Tu Esperanza.

Resumenes de Salmos 103,91,54


Resumen del Salmo 103

El Salmo 103, escrito por el rey David, es un canto de adoración y gratitud a Dios por Su amor, Su misericordia y Sus incontables beneficios.
David comienza exhortando a su propia alma a bendecir al Señor y no olvidar ninguno de Sus favores. Entre estos beneficios destaca que Dios perdona todos los pecados, sana todas las enfermedades, rescata la vida del peligro, colma de amor y misericordia, y renueva las fuerzas como las del águila.
Este salmo resalta que Dios es compasivo, paciente y lleno de amor, no nos trata según nuestros pecados ni nos paga conforme a nuestras maldades. Su misericordia es infinita para los que le temen, tan grande como la distancia entre el cielo y la tierra.
Así como un padre se compadece de sus hijos, así Dios se compadece de quienes le honran, porque conoce nuestra fragilidad.
El salmo termina proclamando la grandeza del Señor, Rey soberano sobre todo, invitando a todos los ángeles, ejércitos celestiales y toda la creación a bendecir Su nombre.

Resumen del Salmo 54

El Salmo 54 es una oración de David clamando a Dios por ayuda y protección en un momento de gran peligro. Fue escrito cuando los zifitas traicionaron a David, informando al rey Saúl de su ubicación mientras huía por su vida.
David comienza pidiendo a Dios que lo salve y lo defienda con Su poder. Reconoce que tiene enemigos arrogantes y violentos que lo persiguen sin causa y sin tener en cuenta a Dios. En medio de esa angustia, David declara su confianza: “Dios es mi ayudador; el Señor es quien me sostiene”.
Expresa su fe en que Dios derrotará a sus enemigos y cumplirá Su justicia. Finalmente, promete ofrecer sacrificios y alabar a Dios por Su fidelidad, porque sabe que Dios lo librará de toda angustia.

Resumen del Salmo 91
El Salmo 91 es uno de los salmos más poderosos y conocidos sobre protección, confianza y seguridad en Dios.
Declara que quien habita bajo la cobertura del Altísimo y mora bajo la sombra del Omnipotente está completamente seguro y guardado.
Dios es presentado como refugio, fortaleza y libertador. Este salmo afirma que Dios libra de la trampa del cazador, de enfermedades mortales y de cualquier peligro visible o invisible.
Quien confía en Él no temerá al terror nocturno, ni a la peste, ni a la destrucción, porque Dios enviará a sus ángeles para proteger y guardar a los suyos en todo momento.
La promesa es clara: Dios responde, protege, libra, exalta, y da larga vida a los que en Él confían y lo aman.
"Si hoy sientes que necesitas un cambio en tu vida, un consuelo en tu corazón o simplemente alguien que ore por ti, baja un poco más. Estamos aquí para apoyarte en oración y creer junto a ti que Dios tiene un propósito perfecto para tu vida. No estás solo, y juntos podemos llevar tus peticiones ante Él."
PASO 1
Desliza hasta el final
PASO 2
haz clic en el enlace de 'Petición de Oración
PASO 3
"Envía tu petición de oración y permítenos acompañarte en este camino. Estamos aquí para orar contigo y por ti."

🙏Oracion Final


Señor, hoy reconozco que Tú eres mi Sanador, mi Refugio y mi Esperanza.
Declaro que por las heridas de Jesús en la cruz yo soy sano. No importa lo que diga el diagnóstico, no importa lo que vean mis ojos o lo que sienta mi cuerpo, creo en Tu Palabra que es vida y medicina para todo mi ser.
Renuncio al temor, renuncio a la duda, y me aferro a Tu promesa eterna: Tú eres el mismo ayer, hoy y por los siglos.
Gracias, Señor, porque tu amor y tu poder se manifiestan en mi vida. Te doy gloria porque mi sanidad está hecha en el nombre de Jesús. Amén.
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