DICIEMBRE

06 de diciembre – 365 momentos con El


Lo que se apagó en ti, Dios puede encenderlo otra vez.


Reflexión:

Hay momentos en los que el corazón se enfría, la fe se apaga y la vida se vuelve rutina. Oras, pero no sientes; buscas, pero no encuentras; intentas, pero nada cambia.
Sin embargo, la Biblia dice que dentro de ti ya hay un fuego que Dios puso… solo necesitas avivarlo. Este mensaje es para ti si estás cansado, si quieres volver a sentir la presencia de Dios o si deseas que tu vida espiritual cobre vida otra vez. Hoy puedes experimentar el mismo fuego que descendió en Pentecostés y transformó a personas comunes en instrumentos extraordinarios. Este es tu momento.
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Tu milagro comienza cuando el fuego de Dios toca tu vida.

06 de diciembre – Un Día a la Vez: 365 Momentos con Él



Cuando el Espíritu Santo enciende tu corazón, nada vuelve a ser igual.



AVIVA EL FUEGO –
2 Timoteo 1:6 dice: “Aviva la llama del don de Dios que hay en ti”.
En palabras simples:
Dios ya puso fuego dentro de ti, pero te toca avivarlo, mantenerlo encendido.
En la Biblia, el fuego representa la presencia y la fuerza del Espíritu Santo.
En la vida diaria podríamos decir:
si no avivamos el fuego, el corazón se apaga, las fuerzas se cansan y la fe se vuelve fría.

¿Tienes fuego hoy por Dios?¿O sientes que tu corazón está apagado, cargado, sin ganas, sin fe?

EL FUEGO QUE CAMBIA TODA BATALLA

En 1 Reyes 18, Elías se enfrentó a 450 profetas falsos. Él pidió que el verdadero Dios respondiera con fuego… ¡y Dios lo hizo!
Ese fuego no solo cayó del cielo, también cayó sobre su vida para darle valentía, fuerza y dirección.
Quizá tú hoy también estás enfrentando tus “profetas de Baal”:
  • problemas
  • enfermedades
  • deudas
  • malas noticias
  • cansancio emocional
Pero si le dices a Dios:
“Aviva el fuego en mí”, Él responderá.

PENTECOSTÉS: CUANDO EL FUEGO BAJA DE REPENTE

Después que Jesús ascendió, 120 discípulos estaban encerrados, asustados, cansados… igual que muchos hoy.
Pero estaban esperando una promesa: el Espíritu Santo.
Hechos 2:2-3 dice que “de repente” vino un estruendo del cielo y lenguas de fuego se posaron sobre cada uno.
Ese mismo “de repente” también puede visitarte hoy.
Y de repente…
  • sentirás fuerzas nuevas
  • desaparecerá la tristeza
  • se irá la enfermedad
  • se romperán ataduras
  • volverá el gozo
  • se restaurarán relaciones
  • volverán sueños que creías muertos
Si lo crees, lo recibes.

¿PARA QUIÉN ES ESTE FUEGO?

El Espíritu Santo viene sobre tres tipos de personas:
Los que tienen hambre
Los que dicen: “No quiero más de lo mismo, quiero más de Dios”.
Como cuando vienes cansado y lo único que te levanta es comer algo caliente.
El Espíritu Santo alimenta tu alma igual.

Los que tienen sed
Isaías 55:1 dice: “A todos los sedientos: vengan a las aguas”.
La sed espiritual es como caminar en el calor sin agua: te cansas rápido.
Solo Jesús calma esa sed.
Los desesperados por Dios
Salmo 84:10 dice: “Mejor es un día en tus atrios que mil fuera de ellos”.
Es cuando dices: “Señor, contigo me basta. Solo un toque tuyo cambia mi vida”.

¿QUÉ HACE EL FUEGO DE DIOS EN NOSOTROS?

1. Purifica
Como el oro pasa por fuego para ser más puro, así Dios usa Su fuego para quemar:
  • malos hábitos
  • pensamientos que dañan
  • pecados secretos
  • heridas del pasado
El Espíritu Santo limpia lo que tú no puedes limpiar solo.

2. Te convierte en un sacrificio vivo
Abraham llevó fuego para ofrecer a Dios.
Hoy no llevamos animales… nos llevamos a nosotros mismos.
La entrega diaria necesita fuego en el corazón.

3. Te protege
Así como Dios guiaba a Israel con una columna de fuego de noche,
su presencia hoy ilumina tus decisiones cuando no sabes qué hacer.

4. Te da dirección
El fuego de Dios te muestra qué camino tomar cuando estás confundido.

5. Te da respuestas del cielo
Cuando David y Salomón oraron, Dios respondió con fuego.
El fuego simboliza: estoy contigo, escuché tu oración, voy a actuar”.

6. Después del fuego, llega la abundancia
Salmo 66:12 dice que después del fuego y del agua, Dios nos lleva a abundancia.
Tu prueba no te destruye… te prepara.

REPITE CONMIGO:


Señor Jesús, aviva tu fuego en mí.
Purifícame, transfórmame, despiértame.
Quema lo que no sirve y enciende lo que viene de ti.
Lléname de tu Espíritu Santo y renueva mi vida hoy.
En tu nombre Jesús, amén.

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🙏Oracion Final


Señor, enciende nuevamente tu fuego dentro de mí. Quita el cansancio, la frialdad y todo lo que me ha apagado. Despierta mi fe, mis sueños y mi corazón. Lléname de tu Espíritu Santo, purifícame y hazme arder nuevamente por ti. Amén.
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